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martes, 31 de marzo de 2015

SEMANA SANTA II

Hoy Martes Santo. Me Acuesto con sueño y me levanto con sueño, desde que nos robaron no hago más que levantarme en las noches a cada momento. No dejo de soñar en los objetos que ya no tenemos. A veces sueño que lo recuperamos, otras veces que no ha sucedido nada.

En el día, con la casa bajo llave, nos asomamos a cada momento por las ventanas y por cualquier lado, para asesorarnos que todo marche bien. Cualquier ruido levanta la sospecha que puede ser esas personas que nos robaron. Hasta nos cohibimos de salir como antes.

Aún cuando estamos desalmados, sin protección de la justicia y creer en la misericordia de Dios, deseamos que no se vuelvan a meter en la casa.

No dejo de pensar en la inseguridad en el país, en la protección de mi familia. La inseguridad cada día es insoportable.

Escribe Hogareña


lunes, 30 de marzo de 2015

SEMANA SANTA I

Hoy lunes. Me levanté muy temprano para ir al mercado. Pero mis hijos "se dieron su postín" como decimos aquí. Ochocientos bolívares en los bolsillos era lo único que tenía para comprar los ingredientes del pastel. 
Entré en la farmacia y llegó el expectorante para la tos (desde hace quince días mis hijos y yo tenemos gripe, y sin poder tomar remedio porque en las farmacias no había). Había Fluconazol y aspirina (lo que nunca me debe faltar en la casa). "por fin" me dije.

El remedio a cientos setenta, y los otros dos a diez bolívares, compré 1 frascos y todas las cajas que pude a ciento veinte.
Al llegar al súper mercado no pude entrar, pues, había una cola infinita para comprar azúcar, por supuesto que me sentí mal por no haber salido más temprano, casi no tengo azúcar. 

Seguí caminando, y, entre caminar y caminar y comparando precio y más precio, compré medio cartón de huevos a ciento cincuentas, y después, tres plátanos, tres pimentón, medio kilo de papas y allí se fueron doscientos bolívares.

Quería hacer el pastel de atún en lata, pero cada lata salía en ciento cincuenta. Así que me acerqué a la pescadería y compré medio kilo de pescado salado a doscientos, medio kilo y algunos condimentos y bueno le quedé debiendo a la señora de bodega. 

 ¡Qué rabia, nunca me alcanza para terminar de hacer las compras y siempre quedo endeudada!

El antepasado pasado hice dos bandejas de pastel. El año pasado dos. Y para éste años haré la bandeja más pequeña que tengo. Y me imagino que para el año que viene no haré nada.

Escribe Hogareña

viernes, 27 de marzo de 2015

DISCURSO DEL GOBERNANTE

Ates de ayer en la noche, acostada en mi cama con mis hijos mirábamos la televisión. Y mientras pasábamos los canales para seleccionar algún canal, me detuve por unos instantes, en unos de los canales nacionales. Era una cadena nacional, donde el presidente de la República hablaba y hablaba, en ese instante dijo “camaradas y camarados” y sin mediar palabras mi hijo de nueve años empezó a reírse para luego agregar “bueno mamá, entonces tendremos que decir “caballeras y caballeros / damas y damos”. Yo me quedé pensando un rato y luego contesté “bueno, diremos cielo y ciela, silla y sillo…” y por allí nos fuimos.

Será que nuestro presidente no tiene un equipo (tren ejecutivo), como lo tiene cualquier presidente que le de estudios y prepare los discursos. Ya basta de tanta metida de pata. Ya me da vergüenza, una vergüenza ajena que me afecta como venezolana que soy.

Cómo es posible que todavía cometa errores tan grave, será que  no aprendió de “millones y millonas”. Y lo dice con su cara tan lavada y sigue adelante como si fuera una gracia. Qué dirán nuestros antepasados, nuestros profesores de literarias, escritores, periodistas y eruditos y miles de profesionales venezolanos, la gramática española, los libros y diccionarios,  los extranjeros, y lo peor, nuestros hijos, ¡cuál es el ejemplo para nuestra nación! Que ni siquiera quise discutir el tema con mi hijo por pena. Solamente aclararle que todos tenemos derechos a equivocarnos, y que bueno, que tenga cuidado en cometer ese tipo de error.


Escribe Hogareña

jueves, 26 de marzo de 2015

RECOGIENDO FIRMAS

Desde que entró el socialismo mediante la presidencia de Chávez, siempre ha hablado mal de Estado Unidos y éste callado. Faltó que hablara el presidente de Estados Unidos para que Maduro dijera que somos “pueblo de paz”, acaso no se han oído ellos mismo cómo han criticado y hablado pistolada de esa nación desde que están en el trono.

Yo soy una de esa que está cansada de oír malas palabras dicha de estos gobernantes en contra de otras naciones, no solo de Estados Unidos, sino también de Colombia, España  y otros (es por eso que cuando empiezan hablar tonterías inmediatamente apago el televisor, radio o dejo de leer sus artículos). En vez de centrarse en los problemas que estamos padeciendo desde que están en el poder solo han hablado paja de los demás. Pero cuidado, decir algo de ellos, porque allí mismo se ponen engrinchado y santos
.
Deberían más bien recoger firmas para poner en marcha la seguridad, la economía, la salud, y reactivar el trabajo en el país. Basta ya de tantos engaños, realizando marchas tras marcha, y parando los trabajos de los venezolanos, politiqueando y metiéndole embuste a todo el mundo. No estamos bien, andamos muy mal.
Y en lo personal, no creo que el presidente de los Estados Unidos de su brazo a torcer, porque fue una decisión bien pensada y planificada. No como aquí que solo dicen cosas por decir, sin ninguna base, estudio ni planificación.

Escribe Hogareña

miércoles, 25 de marzo de 2015

SOLUCIONAR LOS VERDADEROS PROBLEMAS

Si apenas han pasado tres meses de éste año, y todo lo que ha pasado en mi familia en materia de delincuencia e inseguridad, imagínense como será en la población. Sin mencionar la falta de alimentos, y horas y horas, haciendo cola sin poder trabajar ni producir para un país ni bienestar para la familia. Mientras el gobierno gasta millones de bolívares y recursos humanos en propaganda y publicidad para recoger firma por un decreto que sacó el presidente de los Estados Unidos. Cosa que no ha hecho para corregir los verdaderos problemas que aquejan a los venezolanos.

Si tan solo se gastara esa energía para solucionar la inseguridad, la economía, la educación y la salud del pueblo, valdría la pena. Pero esa payasada que están haciendo es un pantomima más.

Señores nos estamos matando unos a otros  como perros salvajes por falta de gerencia y por falsas ilusiones. Dios tenga piedad de nosotros.

Escribe Hogareña

martes, 24 de marzo de 2015

EN MATERIA DE SEGURIDAD EN MI FAMILIA

Así estamos en materia de seguridad en mi familia:

1.- En diciembre, mi hermana está de salida al trabajo y dos motos la intercepta para quitarle el teléfono recién comprado. Los ladrones describieron el teléfono tal cual ella lo compró. Y solo lo había llevado tres veces al trabajo. Se presume que fue los propios compañeros de trabajos quienes la mandaron a robar.

2.- En diciembre, acribillan a un primo político, claro, el muchacho estaba en malos pasos. Lo matan porque se cambió de banda, según.

3.- En enero, mi madre va al supermercado a realizar las compras de todos los fines de semana y un muchacho con un cuchillo le pulla la espalda pidiéndole la cartera, quien se llevó todo el dinero de la comida.

4.- En febrero, mi hermana saliendo de casa, dos motos se acercan y la apuntan con una pistola, ella se baja y como el carro no encendía porque tenía una falla mecánica el ladrón quería matarla. Para luego querer secuestrar a sus tres niños, y después de tanta insistencia golpearon a los niños marcándoles el rostro y cuerpo.

5.- Finales de febrero, matan el sobrino de una amiga. Según por ajuste de cuenta. Y el papá indignado un profesor jubilado, se paró delante de su hijo muerto, muy dolorido y dio un discurso para los jóvenes quienes veían al muchacho bañado en sangre en media calle y que nadie quería socorrer para llevarlo al hospital.

4.- Inicio de marzo,  mi tía, después de cuatro horas de estar haciendo cola para comprar dos bolsas de comidas, y parar un taxi, éste le quita las bolsas de comidas con una pistola y le registra hasta el rabo para ver si tenía más dinero.

5.- En marzo, se meten en mi casa y se llevan varias cosas, entre ellas las llaves. En plena mañana. Y nosotros con miedo porque sabemos que pueden regresar.

6.- Antes de ayer en la mañana, interceptan a mi hermano, dos carros, en el semáforo y le quitan el carro a punta de pistola. Y como no puso resistencia no le pasó nada.

7.- Ayer en la tarde, me llega un muchacha sollozando, que le robaron en el autobús donde regresaba de la universidad. Solo la cartera, papeles personales y otros. 

Por suerte, se rescató el vehículo de mi hermana desmantelado (una patrulla pasaba por el lugar y se dio cuenta la aptitud sospechosa de los ladrones quienes huyeron inmediatamente, según versión de los mismo policías, porque hoy en día no se confía en nadie). Mi hermano también rescató el vehículo, le quitaron reproductor, batería, cauchos y otros. Y yo todavía con mucho miedo, mi esposo y yo casi no dormimos vigilantes de la casa, dispuesto a cualquier cosa y sin protección de nadie. Por que cuando se fue a poner la denuncia, solo te dejan esperando y esperando para luego decirte que es un delito menor y que no vale la pena hacer nada.

Escribe Hogareña

lunes, 23 de marzo de 2015

MI PAZ HA SIDO VIOLADA

Todavía nerviosa, cualquier ruido creo que me van a robar otra vez. Aunque estoy más tranquila, aún creo que me van a sorprender.

La vida de los venezolanos se ha convertido en una zozobra. No hay paz en nada. Es una tortura. Mientras el gobierno hace creer que vamos ser invadido por el imperio nosotros nos estamos matando unos a los otros. Y lo peor es que hay miles de venezolanos que parecieran tener una venda en los ojos o le están pagando muy bien.

Se oyen miles de cuentos e historias de terror en todos lados, nada positivo.

Claro, que si quiero seguir escribiendo más cuentos, anhelos, deseos, nostalgias, alegrías, tristezas y más y más y más, pero como hago si mi paz ha sido violada. Necesito respirar un poquito.

Escribe Hogareña


viernes, 20 de marzo de 2015

SI DIOS ESTÁ OBSERVANDO

Estoy más tranquila. Será porque una amiga me visitó y hablamos y hablamos, y por un momento se me olvidó que en mi casa entró un desconocido y se llevó algunas cosas. Aunque sé muy bien que en cualquier momento puede regresar.

A veces me pregunto si Dios está observando lo que hacemos. Si de verdad mira a las personas cometer tantos delitos y él sin poder mover un dedo, porque será que no hace nada. Es tan injusto una violación o un asesinato y miles de cosas malas más, que no se siente la presencia del todo poderoso. Del que creó el cielo y la tierra, ese ser supremo que todos creemos y que necesitamos creer para sentirnos más seguro. 

Hay muchas personas que no cree en Dios, que simplemente somos parte del universo y que cada quien hace las cosas de acuerdo a sus criterios. 

Lo cierto es que los sentimientos existen, bien sea buenos o malos, y están allí. Sin importar nuestras acciones, dispuestos hacer lo que digamos. Somos nosotros lo que decidimos. Aún cuando si Dios está allí observando,  que se olvidó de nosotros o que si existe o no existe.

O somos tan pecadores que estamos pagando nuestros culpas. Aún en la existencia de Dios hay que seguir adelante luchando por subsistir y tratar de ser feliz.

Escribe Hogareña

jueves, 19 de marzo de 2015

CON LOS NERVIOS DE PUNTA

Cualquier ruido en mi casa me asusta, con los nervios de punta. No me siento segura en mi hogar. Más decepcionada  y preocupada que antes. La situación en nuestro país y la calidad de vida es mucho más grave que cualquiera de nosotros se lo pueda imaginar. 

Hay más muertos en Venezuela, más injusticia y más hambre que en los países que se encuentra en guerra en estos momentos.

Escribe Hogareña

miércoles, 18 de marzo de 2015

TENGAN MUCHO CUIDADO

Antes de ayer entré a las estadísticas de hurto en mi propia casa. Lamentablemente, con gran tristeza en la alma, mucho dolor y lágrimas derramadas por tan hecho cruel. 

Así estamos en el país, nos roban y nada pasa. solo te dicen que "bueno tengan mucho cuidado" pero no podemos hacer nada". 

Gracias a Dios que mi familia está sana y salvo. Deseando que no nos pase nada malo y pidiéndole misericordia a Dios, a los ladrones y a mi Venezuela un poco de compasión.

Escribe Hogareña

lunes, 16 de marzo de 2015

OTRA HABILITANTE

Otra Ley Habilitante, y todavía no sé para qué es. Según y que para combatir la guerra de Estados unidos contra Venezuela. Pero Muchas personas han dicho que es para poner preso a los que piensen diferentes al socialismo. Otro, que para radicar de una vez a los políticos o partidos opositores. Lo cierto es que la ley ya fue aprobada con mucho entusiasmo y aplausos.

Sin embargo, haciendo recuento de las leyes habilitantes anteriores y que no han solucionado la situación tan precaria de los venezolanos y que estamos peor. Por ejemplo la anterior ley, que era para solucionar la escases de los alimentos, pues, hoy en día hacemos más colas que antes, nos ponemos como leones por un paquete de papel sanitario. Reconozco que soy una de las que peleas en las colas para que no se coleen y que pierdo el estribo al ver las injusticias de parte de los se creen más inteligente que yo y buscan la manera de comprar ante de mi persona.

Y hablando de otra cosa. Me pregunto  porque el presidente se molestó tanto por lo que dijo el presidente de Estados Unidos, si todos sabemos que desde hace más de catorce años, el oficialismo a calificado y dicho a toda boca miles de barbaridades de Estados unidos y que éste nunca ha respondido a sus ofensas, siempre callado aguantado y aguantando las locuras del oficialismo venezolano. Y solo bastó que el presidente dijera algo para que el presidente Maduro se ofendiera, y que pusiera en alarma a la nación. Y aprovechándose de la situación para pedir una ley habilitante, o sea estaba esperando algo para pedir el poder absoluto en Venezuela.  

Escribe Hogareña

viernes, 13 de marzo de 2015

VOTACIÓN V

Corrupción: Es el pan nuestro de cada día. Mucho dinero por todos lados para ganar como sea las elecciones. Por ahora sacrificar un poco el dinero de los venezolano, un dinero que por ahora no irán para los bolsillos de los poderosos sino para encantar al pueblo, con un poquito en cualquier esquina. 

Es el descaro de hacer las trampas que ni siquiera disimulan, porque ya se perdió la vergüenza y la dignidad de la razón de ser.

Escribe Hogareña

 
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