...ECHARSE TIERRA ENCIMA

El internet fallando más que nunca. Mis hijos no hayan cómo hacer sus investigaciones. Nos acostumbramos tanto a ésta tecnología que ya casi no utilizamos los libros.

La luz también fallando a cada momento y los vecinos alarmados augurando el peor escenario de la situación tan mala que en éste momento vivimos en el país.

Ayer en plena exposición en el aula de clases, entró de repente un representante llorando pidiendo permiso para llevarse a su niña. Ya que había oído que se llevaron a  un grupo de estudiantes menores de edad a servir al país.

Así mismo hicieron muchos representantes. Nosotros que no sabemos nada, porque estamos trabajando todo el día  también nos asustamos. 

Y sí era verdad que se habían llevado a los muchachos pero no era por la razón que decían la gente sino que esos muchachos liceístas le estaban tirando piedras a los micro buses que pasaban en la avenida. Y tampoco lo metieron presos sino que llamaron a sus representantes.

Estamos con los nervios de punta, no sabemos qué pensar y qué hacer. Simplemente seguimos en silencio, con una tensión que cada día nos agobia aún más.

No contamos con dinero para abastecernos de comida, el agua llega cada tres día, la luz está fallando a cada momento y así estamos a la deriva, culpando a todo el mundo pero silenciosamente.

Pedirle a la gente que respire y se calme es como echarse tierra encima. El desespero y las garantías se perdieron. Solo nos queda por esperar a ver que se viene encima.

Escribe Hogareña